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Surfear es algo que siempre me ha gustado, pero no lo hago sobre las olas, más bien sobre internet y concretamente sobre la Social Media que es lo que se conoce aquello que reúne a las diferentes redes sociales, los blogs, los foros, wikis, etc.
Para surfear en estas aguas lo primero que debes pensar es que es lo que tienes para ofrecer. Y una vez que lo has «detectado» entonces pensar como sacarle provecho.
Son muchos los factores para poder «surfear» las mejores olas y sacarle el mejor partido.
Una de ellas es saber cuando debes meterte en el agua. Algunos «pros» incluso hablan de que debes hacerlo antes de aparecer las olas ya que si no te adelantas para cuando entres estará llena de otros surferos.
Debemos fijarnos en el viento, en las mareas y muy especialmente en la hora, en el momento y en el sitio donde hacerlo.
La hora, el momento y el sitio es el símil que quería utilizar para explicar la importancia de publicar (o surfear) cuando tu público (las olas) se encuentren llegando en racha, para no tener que esperar y perder nuestro valioso tiempo.
En internet el éxito es efímero, quizás demasiado efímero para el esfuerzo que nos lleva, incluso puede durar unos pocos segundos (a veces ni eso), pero esa es una de las reglas del juego.
Muchos de los «gurus» del mundo del «marketing online» lo saben. De nada nos vale unos contenidos de calidad si cuando los ofrecemos o los damos a conocer nuestro público objetivo no está online. La información se va amontonando y para cuando llegan a conectarse otros muchos les habrán «invitado» a visitar los suyos habiendo perdido nuestra oportunidad.
Y hablando de coger olas y de surf, os dejo unas fotografías que saqué en Sopelana el verano pasado. Me centré en este surfero ya que además de tener un estilo muy especial también parecía comprender a las mil maravillas donde y cuando vendrían las olas y desde luego a mi me vendió lo que hacía.
Gracias por la sesión Dude 😉